Con la permanencia en el horizonte, reciben en un choque intrascendente de cara a la segunda fase al C.N. Vallirana barcelonés (sábado, 17:00 h)
La decimotercera y penúltima jornada de la primera fase en Segunda Nacional masculina se antoja de probaturas para el Club Waterpolo Dos Hermanas PQS. Y es que, sin opciones matemáticas de lograr una de las cuatro primeras plazas de su grupo para acceder a la fase previa de ascenso, este sábado se mide a partir de las 17:00 horas en el Centro Acuático de Montequinto a un rival, el C.N. Vallirana de Barcelona, ante el que no podrá arrastrar puntos de cada a la fase por la permanencia, a la que ya está abocado.
Quinto clasificado provisional tras la decisiva derrota del pasado fin de semana ante el Concepción Ciudad Lineal (11-8), el cuadro nazareno afrontará el choque con la mente puesta en lo que hagan sus rivales directos por la salvación y pensando en la visita de la última jornada a tierras baleares. Allí la esperará el actual colista del grupo, el Brooklyn Club Waterpolo Ciutad palmesano, ante el que esta vez sí estará obligado a sumar los dos puntos que reconocen al vencedor de cada choque esta temporada para acceder con la mayor cuantía posible a la ronda definitiva del curso liguero, para la que arrastrará los resultados con los rivales directos a los que ya se ha enfrentado en su grupo.
Intentando corregir los errores precedentes que le han descolgado por escaso margen de las posiciones de privilegio, el equipo sevillano buscará a pesar de todo una nueva victoria, la quinta de la campaña en la categoría de bronce, con la que recuperar sensaciones. En este sentido, los chicos de Pepe Barroso y ‘Jota’ Murube deberán equilibrar su juego y mejorar su eficacia en ataque para intentar superar a un Vallirana al que ya plantó cara en el partido de la primera vuelta.
El último precedente entre ambos equipos, jugado a finales de noviembre en tierras catalanas, se decantó del lado local por 15-13 tras un nefasto último cuarto (7-2) que daba al traste con lo realizado hasta entonces por el C.W. Dos Hermanas PQS, que ganaba 8-11 a falta de los últimos ocho minutos. La falta de efectividad condenaba a los nazarenos, que intentarán no ser reincidentes y recuperar su mejor versión ante los suyos.
