Amancio Renes Esteban era sacerdote y maestro de las Escuelas del Ave María, tal como se recordaba en una lápida de mármol que estaba colocada en la fachada de la casa que fue demolida, hoy de nueva construcción, junto a la farmacia de la Plaza de Menéndez y Pelayo. En sesión de 23 de diciembre de 1914 (folio 61) en el pleno queda enterado de una comunicación de Amancio Renes informando que el 21 de diciembre de 1914 el Sector Universitario de Sevilla le concedió autorización para que funcionaran legalmente las Escuelas del Ave María. Se había instalado la benemérita institución docente en terrenos cedidos a tal fin por la familia Ybarra, que creó una fundación para ello. En 1918 se terminan los edificios que conformaban las Escuelas, hoy prácticamente destruida a excepción de la Iglesia ruinosa, sobre Proyecto del Arquitecto regionalista Pablo Gutiérrez Moreno, a quien se deben, entre otros, la mayoría de los chalets del sevillano Barrio del Porvenir (A. Villar Movellán: «Arquitectura del Regionalismo en Sevilla», 1979 pág. 521).
El 22 de marzo de 1935 (folio 12) se impone el nombre de este benemérito maestro al «trozo de calle que va desde la venta de Las Palmas al almacén», en la Barriada denominada «Olivar de Don Juan», en «El Palmarillo».
Fuente: Libro Calles, Plazas, Campo… Dos Hermanas de Pedro Sánchez Núñez de 2004