Tras ganar la cita de Alcalá del Río, el piloto sevillano de Binakart/Intrepid pierde en el pesaje lo ganado sobre la pista.
El sevillano Manu Bejarano ha dado este domingo todo un recital en el circuito de Alcalá del Río con motivo del Campeonato de España de kart en la categoría X-30 (125 cc con embrague automático) para proclamarse nuevo campeón nacional de la modalidad. Aunque la corona lograda sobre el trazado alcalareño le ha sido posteriormente arrebatada, después incluso de subir al podio, tras no alcanzar en el pesaje, por sólo 100 gramos, los 166 kg. requeridos en el reglamento de la competición.
El piloto de la escudería Binakart, que finalmente competía con un chasis Intrepid, ha tenido que ir sorteando todo tipo de obstáculos durante el fin de semana en busca del ansiado título que ha tenido como punto culminante el del pesaje. Y es que ya el sábado, en las series clasificatorias, terminaba cuarto en la primera y tercero en la siguiente, de la que era descalificado por una supuesta irregularidad en su motor. Esto le llevó a partir en la prefinal de hoy, donde sólo salían los 34 mejores de los 53 inscritos, desde el puesto 25º, aunque el ritmo marcado en los entrenamientos, donde se mostró como el más rápido, lo pudo trasladar a la carrera para acabar en la cuarta plaza. Y ya en la final, partiendo desde ese lugar en la parrilla, se hizo con una victoria que sólo los despachos se empeñan en negarle a falta de que las reclamaciones puestas den sus frutos los próximos días en la Federación Española de Automovilismo.
Manu Bejarano: “A pesar de todo lo que ha pasado estoy muy contento. Parece que la han tomado conmigo, porque todo eran problemas, pero pude pasar del 25 en la prefinal al cuarto y luego ganar en la final. Por algo fui siempre el mejor en los entrenamientos, aunque luego en las clasificatorias no lo podía plasmar. Me siento campeón de España, porque nadie me ha ganado en la pista”.